LA RESPIRACION FUEGO

 

Cómo hacer paso a paso la respiración del fuego y cuáles son sus beneficios

Información general de la Respiración del fuego

Dentro de los métodos más apropiados del yoga para hacer que la respiración sea más tranquila, más suave, más fluida y más fina, se encuentra la respiración del fuego.

Esta técnica de respiración es esencial en la práctica de Kundalini Yoga y también de otros estilos, ya que se complementa con numerosas posturas.

En el yoga, la mayoría de los ejercicios de respiración nos ayudan a entrenar y profundizar la exhalación. Esto tiene mucho sentido porque, durante los días de estrés y angustias, los músculos se tornan particularmente tensos en la mayoría de las personas, quienes presentan dificultades para exhalar por completo y relajar su respiración en general. Tal incapacidad, a largo plazo, causa daños al sistema nervioso.

En el caso particular de la respiración del fuego, es una técnica que consiste en hacer que la respiración sea más poderosa y profunda.

¿Qué es la respiración del fuego?

La respiración del fuego es una de las formas de respiración más activadoras que el yoga ha desarrollado, debido a que enfatiza tanto la inhalación como la exhalación, y la mayoría de la gente puede practicarla con seguridad.

Una vez que el practicante de yoga ha aprendido a dominar esta técnica de respiración por más tiempo puede tener un mayor control del pensamiento y las ideas más claras. La respiración del fuego es una técnica recomendada, también, para las personas que han acumulado demasiada presión interna.

Paso a paso la respiración del fuego

¿En qué consiste la respiración del fuego?

La imagen del jadeo en los perros es muy útil cuando se trata de explicar y comprender rápidamente el principio de la respiración del fuego. Al igual que para el perro, el ritmo de la respiración es rápido y continuo, y la dinámica es claramente espiratoria y no inspiratoria. Sin embargo, no se practica con la boca abierta y jadeando, sino más bien por la nariz, con la boca cerrada.

Otra imagen que describe bien la exhalación de la respiración de fuego es imaginar que una pequeña mosca está tratando de entrar en una fosa nasal, y el cuerpo reacciona ejecutando una acción natural que consiste en soplar fuerte hacia el exterior por la nariz.

Estos dos ejemplo han dejado claro que durante el ejercicio de la respiración del fuego, la exhalación es “activa” y la inspiración, “pasiva”. La primera, además, es fuerte, incluso ruidosa en las fosas nasales; mientras que la segunda es silenciosa.

Por lo tanto, lo que caracteriza esta técnica de respiración es exactamente lo que la diferencia de la respiración simple y normal.

Respiración del fuego: paso a paso

  • Siéntate cómodamente con la espalda recta y coloca tus manos unidas frente a tu pecho como una postura de oración.
  • Enraízate profundamente sobre tus piernas y pelvis en el suelo.
  • Cierra los ojos y centra tu mirada interna en el espacio entre las dos cejas.
  • Toma conciencia de tu eje vertical. Comienza en el medio del piso pélvico y eleva a través de la mitad de la pelvis, el abdomen y el pecho, el cuello y la cabeza hasta el ápice. Alíneate con este eje vertical.
  • Relaja tu respiración y escucha tus pensamientos por un momento.
  • Comienza ahora con la respiración del fuego. Para eso, respira dentro y fuera de la nariz con la misma intensidad; rápida y rítmicamente.
  • Luego, inhala y mantén la respiración durante 10 segundos antes de exhalar y respirar normalmente.
  • Cada vez que exhales, aprieta conscientemente el ombligo; cada vez que inhales, relaja la pared abdominal. Encuentra un ritmo en el que puedas practicarlo de forma relajada.
  • Continúa por un minuto; luego gradualmente libera la postura, coloca las manos sobre los muslos o las rodillas, con la palma hacia arriba.
  • Observa tus sensaciones y el flujo natural de tu aliento durante 3 ó 5 minutos.
  • Repite esta secuencia de 3 a 5 veces.
  • Luego descansa en una postura de relajación (savasana).

Practicar respiración del fuego

Recomendaciones antes de realizar la respiración del fuego

Antes de empezar a practicar la respiración del fuego, la persona debe elegir un asiento apropiado donde pueda hacer una postura cómoda. Puede ser un pequeño cojín o un taburete, con la idea de promover una posición vertical de la columna vertebral y donde sea más fácil tener una liberación de la región abdominal.

La actitud general debe ser relajada, los hombros bajos, la mandíbula suelta, la cara pacífica. El tronco debe estar ligeramente elevado y los omóplatos, muy juntos.

La ropa debe ser lo suficientemente suelta como para no obstaculizar cada movimiento.

Beneficios de la respiración del fuego

Beneficios de la respiración del fuego

Una práctica de la respiración del fuego de 5 a 15 minutos cada día es una buena manera de aprovechar todos sus beneficios. Sin embargo, lo recomendable es comenzar con 3 minutos y trabajar en silencio hasta 5 minutos; para luego ir aumentando progresivamente hasta llegar a 31 minutos.

  • 31 minutos de respiración de fuego todos los días regula la glándula pituitaria que, a su vez, incide en todo el sistema glandular, el cual controla al mismo tiempo también el sistema nervioso.
  • Se dice que la respiración de fuego quema todas las enfermedades y el karma.
  • Aumenta la capacidad pulmonar y la fuerza vital.
  • Estimula el plexo solar para liberar energía natural en todo el cuerpo.
  • Aumenta el voltaje del sistema nervioso.
  • Produce un ritmo alfa global en el cerebro cuando la respiración se realiza correctamente.
  • Aumenta la resistencia física cuando es necesario en una situación de supervivencia y recupera el control en una situación estresante.
  • Fortalece los nervios frágiles.
  • Estimula el centro del ombligo para generar consistencia tanto a nivel mental como físico. Por ejemplo, la respiración del fuego puede ayudar a corregir la incapacidad de cumplir una promesa, la incapacidad de concentrarse debido a las distracciones, etc.
  • Tiene la propiedad de oxigenar rápidamente la sangre, ayudando al cuerpo a desintoxicarse y eliminar los desechos de manera más eficiente.
  • Fortalece la capacidad pulmonar y ayuda a purificar el sistema respiratorio.
  • Genera calor y aumenta el nivel de energía, activando su fluir en todo el cuerpo.
  • Libera toxinas y depósitos de los pulmones, las membranas mucosas, los vasos sanguíneos y las células.
  • Carga el aura y proporciona resistencia para brindar una mayor protección contra las fuerzas negativas.
  • Sincroniza todo el sistema, promoviendo una mayor armonía en la salud interna.
  • Puede ayudar a superar la adicción mediante la purificación de los malos efectos del tabaquismo, el consumo de drogas, el azúcar, el alcohol, el tabaco y la cafeína.
  • Equilibra y fortalece el sistema nervioso.
  • Cuando la técnica se realiza con fuerza, la pulsación del diafragma tiene el efecto de crear un masaje de los órganos internos, mejorando así todo su funcionamiento.

Advertencias para practicar la respiración del fuego

Esta respiración se practica con el estómago vacío o fuera de los momentos de digestión.

No se debe practicar en absoluto durante la menstruación y el embarazo. Tampoco si la persona tiene problemas auditivos, infecciones de oído, desprendimiento de retina, glaucoma, o si la presión arterial es demasiado alta o insuficiente.

No se recomienda practicar esta técnica de respiración cuando la temperatura es muy alta o antes de dormir.

Algunas personas encuentran fácil respirar y pueden mantenerlo lo suficiente desde el principio. Otras personas tienen menos facilidad para concentrarse en la técnica o presentan problemas para respirar, sensación de vértigo, u hormigueo en las extremidades o en la cabeza.

Estas sensaciones pueden ser un signo de la desintoxicación como resultado de la respiración. Sin embargo, pueden aliviarse cuando la concentración y la mirada se centran en el espacio entre las cejas durante la práctica. Incluso mejorarán si la persona asume una dieta ligera.

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